«Máquina De Guerra», dirigido por la periodista vallenata Katia Ospino, inscrito en Festival De Budapest
Bandalos ha producido su segundo documental. Luego del rodaje de “El Volcán del Túnel de la Línea”, el medio firmó este año un contrato con la periodista Katia Ospino, en el que unieron esfuerzos para coproducir en compañía de Calaluna Productions y New Press Swiss Foundation, una investigación periodística con enfoque en derechos humanos, que se enmarca en el género cinematográfico.
Haciendo seguimiento a uno de los casos periodísticos mas importantes para Bandalos, como lo es el trabajo de la Comisión de la Verdad y los hallazgos del comisionado Leyner Palacios, “Máquina de Guerra» se inscribe como producto cinematográfico, bajo la dirección de Katia Ospino, cuya historia es narrada principalmente por sus protagonistas reales. “ Es un documental importantísimo porque por primera vez en la historia del conflicto armado uno de sus victimarios nos va a contar la verdad, pero también los protagonistas son las víctimas, por primera vez en una pieza cinematográfica van a estar víctimas y victimarios. Estoy muy feliz porque es una cesarense, una vallenata con raíces guajiras que está trascendiendo con su trabajo periodístico. gracias a Jehová mi Dios , a mi familia y a todos los que han hecho parte de este trabajo”, dijo Katia Ospino al conocer la noticia.
El documental ya fue inscrito con éxito en el Verziò Festival de Cine de Derechos Humanos de Budapest, Hungría; y aspira ser seleccionado en su edición 19 que se llevará a cabo en 2023.
El Verziò Internacional Human Rights Documentary Film Festival, es el más grande de Hungría y se organiza anualmente desde 2004. Su objetivo es promover la sociedad abierta, con valores democráticos, el Estado de Derecho, la libertad de expresión, el pluralismo y exponer el abuso y las violaciones de los derechos humanos a nivel mundial, a través de documentales creativos y de calidad.
El rodaje de «Máquina de guerra» se realizó principalmente junto a una bifurcación del río Magdalena que es «un gran cementerio», donde se arrojaron los cuerpos de miles de personas aniquiladas por grupos ilegales.
Los responsables no solamente arrojaron a personas de los pueblos vecinos sino a personas venidas de otras regiones del país. Las autoridades colombianas conocían los hechos pero no querían que se dañara su imagen, por lo que se le pedía a los criminales que desaparecieran los cuerpos, para que no se pudieran encontrar, es decir, hacían «el trabajo sucio» de las instituciones.
Los coproductores anunciaron que se encuentran en conversaciones con varias plataformas de streaming, como Netflix, Amazon Prime y HBO, para lograr su distribución masiva.