“El Pollo vallenato” resultó siendo todo un gallo
-Segunda y última entrega-
/Luis Martínez es el “El Pollo Vallenato”/y es candela lo que van a llevar.”
Por: Wilber Fábregas Molina
Créditos: Fotografías, Duvis Romero Rojas Festival Vallenato, Jhonny Pérez, Sebastián Martínez- Familia Martínez Argote- Discos Fuentes- Codiscos- El Heraldo- Periodico Tabloide Solar
Luego de haber logrado por fin Luis Enrique Martínez Argote ser Rey Vallenato, el pueblo consideró que se había hecho justicia después de tantos altibajos que le sucedieron y uno de ellos ocurrió, -como nos lo refirió en una ocasión su nieto Jhonny Pérez- cuando su abuelo participó en el Festival de 1971; algo muy notable lo que el pueblo consideró inapropiado, injusto al referirse que le fue arrebatado el título de rey para otorgárselo al cantautor y acordeonero “foráneo” para sus seguidores, por no ser el ganador de los lados de la región de donde tradicionalmente era oriundo el vallenato, pues; se trató del barranquillero Alberto Pacheco Balmaceda.
En esa oportunidad hubo una serie de protestas al concluir el evento y ese incidente fue tan popular que un paisano de Luis Enrique, el también fonsequero Luis Francisco “Geño” Mendoza, se inspiró para componer el tema “Festival Vallenato” conminando el regreso del afectado al evento, el cual fue aprovechado por el artista venezolano Nelson Henríquez, convirtiéndose en un éxito rotundo y en cuyo aparte señala la estrofa:
/ Pero inconforme el pueblo ha de seguir/ si le estropean sus aires vallenatos y exigen que sean honrados/ Si desde el ruedo al pollo lo vieron salir en las garras del jurado/
. “Luis Enrique Martínez, / el Pollo Vallenato que siempre lo ha sido / volverá a ese ruedo…” La tierra de Pedro Castro, orgullo vallenato y justo ha lastimado al pueblo fonsequero.
Cuando fue elegido Rey Vallenato, sus seguidores, familiares y amigos expresaron su satisfacción, porque se lo tenía bien merecido, al ejecutar con maestría el acordeón, dominando entre el son y el verdadero merengue vallenato, dejando como legado varias escuelas que siguieron ejemplarmente sus enseñanzas.
Este gran valor del Caribe colombiano, guajiro de nacimiento, pero magdalenense de corazón, tocaba magistralmente, con un estilo envidiable y fue bautizado como “ El Pollo Vallenato” por sus notas picarescas y claras, las que adornaba con su sapiencia en forma asombrosa; promovía poemas satíricos, combinándolos con lo sensible, lo que le mereció ese honroso título, porque sus admiradores y escritores sostenían que se asemejaba en las parrandas a un gallo fino que nunca pierde una pelea
Como dice el tema “No me guardes luto” interpretado por los Hermanos Zuleta en una de sus estrofas: “Porque yo me sostengo como el gallo fino que ya se está muriendo, pero en la agonía le mete el pico al otro y lo deja tendido”.
Y siempre se mostraba firme venciendo en las piquerias, razón por la que compuso un tema considerado desafiante, una letra en honor a su renombre; “El pollo Vallenato”
“Oiga muchacho, yo soy Enrique Martínez/que nunca tiene miedo si se trata de tocar/Luis Martínez es el “El Pollo Vallenato”/ y es candela lo que van a llevar.”
Y Luis Martínez “El Pollo Vallenato” tarareaban sus seguidores, su fanaticada.
Nunca se le veía desesperado y a todos los familiares y amigos les daba ánimo porque decía que la vida era una sola y había que saberla vivir, por eso desde muy niño, a los 15 años de edad cuando se dedicaba a su trabajo de machetero, alternaba estas labores con el acordeón, contando con el apoyo de sus progenitores, quienes lo ayudaron para que comprara uno de dos teclados por doce pesos, sin embargo el propietario de aquel kiosco no permitió que se lo pagara sino, hizo un canje:
-Tú me tocas y cantas y yo te regalo el acordeón-le dijo y él, muy orondo aceptó. –
Me imagino que Luis Enrique recordaría en ese instante el tema de Alejo Durán… “Pedazo de Acordeón”, que en uno de sus fragmentos dice:
“Este pedazo de acordeón donde tengo el alma mía. Allí tengo mi corazón y parte de mi alegría”
Sus padres nunca pensaron que este jovencito a quien se le veía por las calles del pueblo, animando las parrandas o bailes, sería más tarde un maestro del vallenato, lograría ser Rey Vallenato y en varias ocasiones fue exaltado por Guillermo Buitrago, su amigo, por ese talento propio para componer temas.
Con el pasar del tiempo “El Pollo Vallenato” llegó al Banco-Magdalena- donde conoció a Juan Madrid quien lo enseñó a cantar y a acompañarse con la guitarra.
Su primera grabación
Se forjó como profesional en 1947 y en 1948 realiza su primera grabación incluyendo temas como “Seis días de la semana” y “Recuerdos de Emilianito”. Este trabajo tuvo acogida y de ahí en adelante todo fue fácil para el cantautor, a quien más tarde le tocó alternar con otros artistas de la talla de Abel Antonio Villa, Emiliano Zuleta “El Viejo”, Pacho Rada, Alejandro Durán y Alfredo Gutiérrez.
De él se decía que tenía una mente de poeta, una voz parrandera y una gran maestría al ejecutar el acordeón, ganándose el respeto de los demás colegas de todas las generaciones. Se dio el lujo de grabar para todas las casas disqueras. Y para el sello costeño de Codiscos graba el trabajo que fue titulado “Los tres grandes del acordeón vallenato”, con Abel Antonio Villa y Alfredo Gutiérrez.
Estos tres grandes del arte vallenato le ponen sabor a la letra de este tema y al mismo tiempo corean:
-Pregunta Alfredo Gutiérrez: “ Oye quien es el que toca, Luis Enrique o Abel Antonio, Luis Enrique, Luis Enrique; no que lo diga la gente… “ Luis Enrique, Luis Enrique.
Se destacó en esa larga duración un mosaico “Hombre divertido”, al estilo de “El Pollo”, que contiene otros temas como: “Merenguito sabroso”, “El vallenato” y “Cumbia cienaguera” todas, composiones de su autoría, así como “La caja negra”, de Rafael Valencia, “El Reparto” de Camilo Namen y “La piña” de Nola Mestre, los cuales ejecutó con verdadera destreza.
Sus creaciones musicales, se cree, superaron las ciento veinte como autor e intérprete, destacándose entre otras famosas “El Jardín de Fundación”, “El Pollo Vallenato”, “La Tijera”, que hizo famosa posteriormente Daniel Celedón y el “ Pollo Isma”, Ismael Rudas, en la época donde el vallenato estaba en su apogeo en algunas ciudades como Barranquilla, y la versión internacionalizada de “La Cumbia cienaguera” “ Mi despedida “, “No me hagas sufrir”, “Zunilda”, “La Niña Esquiva” , “El Caribe”, “ El Resentido”.
Las bodas de Plata
Este tema de su autoría narra lo que en verdad sucedió en abril de 1972 en “Las bodas de plata” de Luis Enrique con Rosalbina, cuando se hizo una fiesta bonita, con música vallenata, porque aquí “El Pollo Vallenato” echó la casa por la ventana, como se dice popularmente, pues la parranda duró una semana completa y a ella asistieron, entre otros, Alejandro Durán, Andrés Landeros, Calixto Ochoa, “Colacho” Mendoza, Emiliano Zuleta y Pacho Rada.
Como en las grandes celebraciones, hubo ron, aguardiente, whiskey y cervezas. De comida se ofreció carnero, gallina y pavo y como complemento, porque todo se había acabado, terminaron comiendo pescado. Sus amigos y sus amigas, todos fueron a su casa y salieron satisfechos, y más contento estaba Luis Enrique con su Rosita, porque no todos los días se cumplen 25 años felices de casados.
Su muerte
La muerte de Luis Enrique fue sorpresiva. Ese día su nieto Johnny había dialogado en la mañana con él, lo ayudó a afeitarse, se jugó con su abuelo querido y se marchó con sus amigos a visitar una finca de la familia. Al regresar a su casa encontró en medio de la sala el ataúd con los restos mortales del sexto Rey Vallenato algo que lo golpeó muy duro.
Todas las emisoras de la Costa comenzaron a difundir la noticia y Armando Zabaleta, que se encontraba en Barranquilla, tomó un carro expreso y fue el primero en llegar. Así lo hicieron uno a uno, Consuelo Araujo, “La Cacica” “El Debe” López, Miguel López, Jorge Oñate, Álvaro López, Alfredo Gutiérrez, Maribel Cortina y Abel Antonio Villa, entre otros.
SAYCO, ausente
Los familiares de “El Pollo Vallenato” manifestaron que la Sociedad de Autores y Compositores de Colombia SAYCO no se hizo presente en las honras fúnebres del artista, no llegó ningún representante de esa firma; solo sus verdaderos amigos que se mostraban satisfechos porque éste en estos tiempos, por su tema “La tijera” estaba recibiendo buenas regalías; las mejores en todas las épocas y esto se debe al éxito que tuvo Carlos Vives con su composición.
Fueron muchos los seguidores, no solo del maestro Luis Enrique Martínez y de muchos compositores, que sostenían que en esa época a nuestros artistas no se les reconocían sus derechos, razón por la cual los músicos de la región en distintas ocasiones coincidieron en que “estaba bueno” de tantos homenajes póstumos, que estos se deberían hacer en vida, porque después de su partida, como decían nuestros abuelos en sus populares refraneros : “ Ya para que dijo la lora”, es decir los beneficios, reconocimientos se hacen en vida.
Me viene a la memoria una vez más y resalto a nuestros compositores y valores culturales como el caso de Armando Zabaleta en la composición “No me guardes luto” interpretada por los hermanos Zuleta:
Negra si me muero no me guardes luto/ si el muerto no oye ni ve ni entiende/Ahora que estoy vivo es que debes quererme/así que recibo tus caricias con gusto
En nuestro espacio de Facebook Caribe Hoy, le rendimos tributo a la memoria de este gran ícono caribeño Luis Enrique Martínez que le dio al vallenato renombre a través de sus sones, merengues, y ritmos que enaltecieron a esta región Caribe y a nuestro país.
De igual manera como colaborador habitual del periódico e El Heraldo de Barranquilla al haberse cumplido, un mes y cinco días de su muerte en la sección Panorama costeño , bajo el Titulo Así Era “ EL POLLO VALLENATO”, domingo 30 de abril de 1995.
Surgieron muchos comentarios acerca de este insigne valor entre ellos Jesús Enrique Acosta Fuentes, quien aseguró que
“ De los acordeoneros de música vallenata junto a “Chico”Bolaño, sin duda y de lejos fueron los mejores, puedo asegurar que todos los acordeoneros de las generaciones posteriores han tomado sus arreglos y los usan (tocan en sus presentaciones) reconocidos por ellos mismos en su gran mayoría “.
Raismer De La Hoz Ojeda sostuvo: “De los mejores juglares que ha dado mi Guajira y sigue Emiliano Zuleta
Carlos Rafael Soto Zambrano: “ La maestría de Luis Enrique Martinez lo condujo a crear un estilo inconfundible, catalogado como un maestro del acordeón. Todo el mundo trata de imitar su estilo, pero muy difícil lograrlo. Con puro talento le sacaba las notas de su acordeón.”
Alvaro Alario: “ Sin duda, el hombre que le dio vida al acordeón, institucionalizó la forma de interpretarla dándole un carácter propio que todo acordeonero se ve obligado a seguir en cada ejecución”
Luis Enrique Martínez es y seguirá siendo uno de los mejores compositores e intérpretes que ha parido la región caribe, un orgullo para nuestro país Colombia y para otras naciones del mundo que han sabido reconocerle su talento, sabiduría innata.
Sus familiares, amigos, seguidores y hasta sus colegas de ese bello arte reconocen que es así. Un hombre que afrontó la vida con sus cualidades, de gran corazón, humilde, trabajador y se vio envuelto de amor de los suyos, especialmente de su Rosalbina querida, quien se encuentra en la gloria disfrutando al lado suyo y de especiales momentos.
Nos quedan muchos baluartes del folclor que deben ser valorados como deben ser por el gobierno, la cultura en general, porque la sociedad siempre los reconocerá y no dejan de escuchar sus voces a través de las canciones convertidas en poesías y mensajes de amor, vivencias y costumbres que no deben desaparecer.
Y como preguntó Alfredo Gutiérrez en el álbum Los Tres Grandes del Acordeón: “ Oye quien es el que toca, Luis Enrique o Abel Antonio… Luis Enrique, Luis Enrique; no que lo diga la gente… “ Luis Enrique, Luis Enrique.
Luis Enrique nació y fue bautizado como el pollo y terminó siendo un buen gallo del folclor vallenato. Todo un gallo.
“Oigan muchachos yo soy Enrique Martínez
Quien nunca tiene miedo si se trata de tocar
Soy Luis Martínez el pollo vallenato
Y es candela lo que van a tomar
Hago los fandangos con mi pañuelito rojo
Y mi acordeón en la mano dispuesto para tocar
Soy Luis Martínez el pollo vallenato
Y es candela lo que van a llevar
Ando por la calle con mi acordeón en la mano
En busca de mis amigos dispuesto pa’ parrandear
Soy Luis Martínez el pollo vallenato
Es candela lo que van a tomar
Oigan muchachos
Oigan la nota
Como toca el vallenato