“Nuestros sueños son más poderosos que las armas”: estudiantes en Valledupar participaron de la conmemoración del Día de las Manos Rojas
En el marco de la conmemoración del Día de las Manos Rojas, la Unidad para las Víctimas, en conjunto con instituciones como Agencia para la Reincorporación y Normalización, Defensoría del Pueblo, Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Gobernación del Cesar, Policía Nacional, entre otras, desarrolló un panel en la Institución Educativa Milciades Cantillo Costa de Valledupar, donde con dos testimonios se les llevó el mensaje a los estudiantes sobre el rechazo al reclutamiento forzado de menores de edad.
Un total de 120 estudiantes del grado octavo participaron activamente en este espacio, donde hicieron preguntas y escucharon atentos las historias de dos personas, hombre y mujer, que por circunstancias de la vida llegaron a empuñar las armas cuando eran menores de edad; sus testimonios sirvieron para empoderar a los jóvenes con un mensaje: “nuestros sueños son más poderosos que las armas”, al escuchar las historias de los dos panelistas los alumnos del plantel aseveraron que su lugar son las aulas de clases.
“Con esta conmemoración, la Unidad para las Víctimas se suma a las iniciativas para concientizar a la sociedad colombiana sobre el problema y a recordar que niñas, niños y adolescentes son titulares de derechos, por ello es un compromiso del Estado, la sociedad y la familia brindar protección integral y evitar violencias.” señaló Mario José Ríos Oñate, director territorial Cesar – Guajira de la Unidad para las Víctimas.
En el conversatorio fueron claves los testimonios de las personas que en su infancia fueron llevados a formar parte de las filas de grupos armados, bajo reserva de su identidad tanto el hombre como la mujer aseguraron que nunca fue una buena elección ser parte de la guerra, “Desde los 12 años hice parte de las filas de un grupo armado, eso no es fácil ni es la vida que se merece un niño o niña en Colombia, ni en ninguna parte del mundo, pierde uno todo, pierde su niñez, su adolescencia, el derecho a compartir con los amigos, con la familia… en el momento fue una decisión “propia”, porque a esa edad nos endulzan, no se dejen, alerten a sus padres si alguien les habla de esto, la solución de los problemas no es irse de la casa, no desperdicien esta edad que tienen” dijo la invitada a la charla que se dio a los jóvenes.
Para cerrar la jornada de conmemoración, la Unidad para las Víctimas invitó a estudiantes, docentes e instituciones locales y nacionales a ser parte del telón de las manos rojas, donde con cada huella se simboliza el compromiso de cuidar a los niños, niñas y adolescentes para que ni uno más sea llevado a la guerra.