A blanco y negro
Un juglar se despidió de su tierra natal, un vacío enorme dejó pero un gran recordatorio sembró.
Omar Geles ha quedado impregnado en nuestras mentes con sus hermosas canciones y vive en armonías en las calles de Valledupar.
Pasa el tiempo y su legado perdura; apenas inicia una nueva era que pondrá color al blanco y negro de este dolor que dejó. Sus familiares y amigos más cercanos, a pesar del dolor, se sostienen para que Omar Geles viva en nuestra mente y corazón.
Cuánto no pordíamos decir de este Maestro; enamoramos, lloramos, nos decepcionamos escuchando las notas de su acordeón. Hoy solo queda decir gracias por permitirnos sentir, experimentar y vivir tus canciones.